La semana pasada fuimos invitados por Raúl Cueto, gerente del restaurante Arsenio Manila, a disfrutar de una degustación de vinos de Bodegas Torres, maridados con unos platitos elaborados en dicho restaurante.
Fue un acierto, el resultado fue estupendo a juzgar por lo que comentamos todos los asistentes y por lo que nosotros mismos pudimos comprobar.
De la mano de Victoria Pons conocimos la historia de estas bodegas y de la familia Torres, cuyos antepasados se asentaron en el Penedés, tierra vinícola desde época fenicia. La familia Torres, desde el s. XIX hasta la actualidad, ha ido transmitiendo el secreto de la elaboración de sus grandes vinos, llegando a ser una gran empresa exportadora que hoy día exporta a 140 países.
Victoria nos fue explicando las características de cada vino que probamos, de forma amena y sencilla pero no exenta de experiencia y conocimiento. Es una gran experta.
Empezamos por Viña Esmeralda, vino del que soy una gran «seguidora» desde hace mucho tiempo y, como es fácil de adquirir, lo compramos con frecuencia para consumirlo en casa.
El Viña Esmeralda es un vino delicado, aromático, limpio, brillante, cristalino, de sabor afrutado. Elaborado con uvas moscatel y Gewürztraminer. Fue maridado con un platito de Caballa en escabeche con fondo de ajo blanco, que estaba muy buena, enhorabuena al cocinero del Arsenio Manila. Maridaje armonioso, ningún sabor anulaba al otro.
En segundo lugar nos dieron a probar el blanco llamado Fransola, nombre de la finca donde se cultiva la uva Sauvignon Blanc con la que se elabora.
En Arsenio Manila decidieron maridarlo con un Tartar de pescado de roca, corvina en este caso, con piñones. Exquisita la combinación.
Como tercer vino a probar nos ofrecieron un Marimar Estate del 2009, hecho en California, donde también Bodegas Torres elabora algunos vinos. Su nombre se puede traducir como Finca Marimar, y debe su nombre a Marimar Torres, una de las hijas de D. Miguel Torres y encargada del proyecto californiano. Cien por cien Chardonnay.
En este caso nos dieron para tomar un Risotto de trufas y verduras verdaderamente delicioso y que maridaba divinamente con este vino.
Dejamos los vinos blancos y pasamos a los rojos. El primer vino que probamos fue un Jean León 3055, vino distribuido por Bodegas Torres y elaborado con uva Merlot. Se trata de un vino con poco tanino, ácido y muy aromático.
Lo degustamos junto a una Sanfaina con bacalao, con hortalizas muy bien cocinadas.
Por último Victoria nos ofreció para probar un Mas La Plana (Casa de La Plana), donde se cosecha las selectas uvas Cabernet Sauvignon con las que se elabora.
Este vino, de nobles y saludables taninos, fue maridado con Carrillada acompañada de espuma de patatas. Otro acierto pleno.
Para acabar nos ofrecieron un gin-tonic muy especial, con una nueva tónica que nos gustó muchísimo, ME, con ligero sabor a limón que le da un toque buenísimo, y ginebra Sloane`s.
Y por si aún no estábamos satisfechos…unas riquísimas trufitas de chocolate.
Muchísimas gracias a Raúl Cueto, gerente de Arsenio Manila, por su amable invitación, y por su interés constante en que estuviéramos a gusto. Y a Victoria Pons y José Manuel Santana, de Bodegas Torres, por darnos la oportunidad de conocer y degustar estos vinos tan exquisitos.


