Hace unos meses unos buenos amigos me regalaron una botella de vino de Oporto de muy buena calidad. Este vino llamado de forma general «Oporto», se hace en dicha ciudad portuguesa. Es un vino fortificado, lo que se consigue añadiendo aguardiente antes de terminar la fermentación. De esta manera aguantaba los cambios de temperaturas y humedades que se producían en las largas travesías marítimas durante los siglos XVI y XVII, siglos en los que tuvo su origen. Tienen mucho aroma y un poco de dulzor, siendo también usado para cocinar en cuyo caso aporta mucho sabor y aroma a los platos, sobre todo de carne.
En esta ocasión he elegido un trozo de presa ibérica, parte que se encuentra en el cabecero del lomo del cerdo que contiene una grasa infiltrada que le aporta ternura, sabor y jugosidad. Al unir la presa con el vino de Oporto hemos conseguido un plato exquisito…Para chuparse los dedos.

Qué necesitamos:
- Un trozo de presa ibérica como de un kilo o algo más
- Una cebolla
- Seis dientes de ajo
- Un vaso grande de Oporto
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
Cómo se hace:
Pelamos y cortamos en trozos la cebolla y los ajos, pueden ser trozos grandes pues después los vamos a pasar por un pasapuré para hacer la salsa. En una olla exprés o rápida echamos aceite en el fondo, lo calentamos y añadimos la cebolla y el ajo, dejando que se ponga muy oscuro, que parezca que va a quemarse, sin que ello ocurra.
Ponemos la carne en la olla y la doramos por ambos lados, echamos sal, el vino y un poco de agua, que la cubra. Dejamos que se haga, unos 15 minutos, con el fuego al 7. Cuando la olla se pueda abrir comprobamos que está tierna. La dejamos enfriar y la cortamos en rodajas.

La salsa la pasamos por un pasapuré, que es lo que le dará la consistencia y el color oscuro. No recomiendo pasarla por una batidora pues el resultado no tiene nada que ver…Riquísima.