Una receta muy sana, con ingredientes muy ligeros y a la vez sabrosos. Se pueden tomar calientes, recién sacadas del horno, o frías como si fuera una ensalada. De las dos maneras están muy buenas.
Qué necesitamos:
- Dos berenjenas
- Tomillo
- Aceite de oliva
- Sal
Salsa:
- Dos cucharadas soperas de mantequilla
- Una granada
- Un yogur griego
- Un diente de ajo picado
- Perejil fresco picado
- Aceite de oliva
Cómo las hacemos:
Cortamos las berenjenas por la mitad, las rociamos con un chorrito de aceite de oliva, y echamos por encima tomillo y sal. Antes le habremos hecho unos cortes para que se hagan bien por dentro.
Pecalentamos el horno a 200º y metemos en él las berenjenas hasta que estén tiernas.
Mientras hacemos la salsa. Desgranamos la granada.
Mezclamos todos los ingredientes restantes, el yogur, la mantequilla, el perejil y el ajo, hasta que la mezcla sea homogénea.
La echamos por encima de las berenjenas y encima un chorrito de aceite.
Adornamos con los granos de las granadas.
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